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domingo, 29 de abril de 2012
Bittersweet
El cambio es ineludible en la vida de todos. Siempre he pensado, y lo sigo haciendo, que el cambio es algo bueno que nos llega a algunos más seguido que a otros. Creo intensamente que incluso debemos impulsar los cambios en nuestras vidas y salir de nuestras "confort zones". Todo esto de manera que impulsemos constantemente nuestros límites, busquemos siempre ser más felices y más que nada siempre buscar cosas nuevas, siempre crecer, siempre ver hacia adelante.
Hay algunos cambios que son más fáciles que otros y el que ahorita sucede en mi vida no me hace feliz pero es necesario. Después de 4 meses la escuela ha llegado a su fin y mucha gente especial que conocí está volviendo a casa. Cuando por fin te aprendes a mover más en tu nueva vida, cuando empiezas a querer, cuando ya tienes a las personas con las que te gusta salir y con las que no, cuando todo empieza a tomar forma... BAM, se acabó. Me hace falta irme a vivir a otro lugar más permanentemente, debe ser completamente diferente y se que algún día lo haré.
Todo eso de las despedidas siempre me pone grave ¿Les pasará a todos?. Es horrendo el decir adiós y ya me ha pasado en muchos lugares, países y diversas situaciones, no volver a ver a personas me pone tristón. Pero eso si, toda la variedad de personas que he conocido siempre serán parte de mi vida y te cambian, te hacen crecer. Cambios y cambios todo el tiempo, siempre todo parece terminar más pronto de lo debido. Pero probablemente, o así creo yo, todo termina en el momento preciso.
Experiencias de vida que te marcan y te cambian para siempre.
Experiencias por las que hay que estar siempre agradecidos.
Adiós a todas esas personas especiales en Antibes-JuanLesPins que he tenido que decir adiós en estos días, se les extrañará y tal vez algún día nos volvamos a ver. Y si no, fue un placer.
Roberto Mora
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